Este documental comienza con una expresión categórica “el
chileno es todo lo mal”…. lo curioso es que casi a cualquier país donde uno va,
y he visitado como 8 y vivido en 4 de sud América, si hiciéramos más o menos la misma pregunta: ¿cómo van las
cosas aquí? ó ¿cómo son Uds.? La mayoría de las veces la respuesta sería
similar, o sea todo está mal. En este artículo pretendo reflexionar sobre
algunas creencias y actitudes que me parecen tenemos en común por lo menos los
latinoamericanos, todos tenemos un “chilean way” solo que va variando de nombre
de acuerdo a la región, y en la mayoría paradójicamente nos sentimos orgullosos
de ser “a nuestra manera” aunque externamente la criticamos o no la aceptamos. Aunque
tenemos cualidades que resaltan y lo expresan principalmente los que vienen del
exterior, como que los latinos somos muy alegres y hospitalarios, aunque visto
desde adentro lo de alegres tiene otra connotación: somos
“carreteros”, “farreros”, “juergueros”, “parranderos”, etc., en otras palabras excesivamente aficionados a la diversión y los placeres, bajo la excusa de que somos explotados laboralmente, vivimos una vida estresada, etc. Lo cual no deja de ser cierto. Muchos afirman que otra característica, también en común, es que somos flojos por naturaleza y esto se lo atribuyen a los genes de los que aparentemente procedemos todos, el de los conquistadores. Me pareció muy acertada la opinión de uno de los jóvenes que discrepa de la idea de este concepto y atribuye nuestra manera de ser a la educación, la influencia de los medios, y en general a todo lo que el ser humano va consumiendo mental y espiritualmente desde la infancia, lo cual llega a conformar lo que somos individualmente y como sociedad. Y aquí aparece un punto que me parece muy importante y lo dice este joven del video, cuando expresa que si un niño crece absorbiendo valores egoístas, materialistas, etc, eso mismo es lo que reflejará su propia sociedad. Si partimos de que el ego (el falso yo) está formado por nuestras creencias, valores, y cultura y crea separación con nuestros semejantes, entonces este mismo ego individual se proyectará masivamente creando lo que llamaríamos el “ego colectivo” separándonos grupalmente, por un lado los que nos identificamos con una manera de ser y pensar y del otro los que son diferentes a nosotros. De ahí nacerían entonces las ideologías, partidos políticos, religiones, regionalismos y hasta las barras bravas de los equipos deportivos. “Nosotros” contra “los otros”.
“carreteros”, “farreros”, “juergueros”, “parranderos”, etc., en otras palabras excesivamente aficionados a la diversión y los placeres, bajo la excusa de que somos explotados laboralmente, vivimos una vida estresada, etc. Lo cual no deja de ser cierto. Muchos afirman que otra característica, también en común, es que somos flojos por naturaleza y esto se lo atribuyen a los genes de los que aparentemente procedemos todos, el de los conquistadores. Me pareció muy acertada la opinión de uno de los jóvenes que discrepa de la idea de este concepto y atribuye nuestra manera de ser a la educación, la influencia de los medios, y en general a todo lo que el ser humano va consumiendo mental y espiritualmente desde la infancia, lo cual llega a conformar lo que somos individualmente y como sociedad. Y aquí aparece un punto que me parece muy importante y lo dice este joven del video, cuando expresa que si un niño crece absorbiendo valores egoístas, materialistas, etc, eso mismo es lo que reflejará su propia sociedad. Si partimos de que el ego (el falso yo) está formado por nuestras creencias, valores, y cultura y crea separación con nuestros semejantes, entonces este mismo ego individual se proyectará masivamente creando lo que llamaríamos el “ego colectivo” separándonos grupalmente, por un lado los que nos identificamos con una manera de ser y pensar y del otro los que son diferentes a nosotros. De ahí nacerían entonces las ideologías, partidos políticos, religiones, regionalismos y hasta las barras bravas de los equipos deportivos. “Nosotros” contra “los otros”.
No resto importancia a las cualidades culturales y
ancestrales de cada región o país, es maravillosa la diversidad, lo negativo es
cuando nuestro apego a esos conceptos se torna excesivo confundiéndolo con
nuestra identidad.
Otra característica de la naturaleza humana que salta al
hablar de esto, es que siempre estamos culpando a alguien más por nuestros
males (viene desde Adán y Eva), siempre es falta de la intervención del estado,
culpa de las transnacionales, falta de educación o por último de algún poder
oculto que no nos permite liberarnos de esa idiosincrasia. No digo que todos
esos factores no sean relevantes pero simplemente no me parecen la causa esencial
y creo que mientras lo sigamos viendo de esa manera más difícil será iniciar el
cambio. Quiero decir con esto que la mirada habría que dirigirla
primero a uno mismo como “ser” más allá de las idiosincrasias, nacionalidades,
religiones, etc., entendiendo primero que todos los seres humanos somos iguales
en esencia, criaturas de Dios, creados a su imagen y semejanza. Por tanto
dotados de la capacidad para conocer nuestra propia naturaleza y asumir la
responsabilidad de cambiar lo que creemos sea necesario cambiar individualmente.
No podemos
negar tampoco la presión social del entorno en que vivimos, sin embargo nada de
eso es excusa para no asumir la parte
personal del cambio que nos toca. Como dijo la madre Teresa: “No esperes que lo hagan los gobiernos, no
esperes que lo hagan las instituciones, hazlo tu mismo”.
Entonces ¿qué es lo
que nos puede ayudar a superar nuestra “chilean way”?
- Tener fe en que podemos contribuir a crear una
reacción de cambio en cadena, cuando asumimos con determinación una postura
personal, sin tomar cuidado de quienes nos sigan o los resultados que podamos
lograr.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Apreciamos! tus comentarios a Clip para el Alma!