La honestidad optimiza las relaciones.

Por Manuel Basurto V.
Si hay una cualidad que considero sumamente importante en cualquier relación es la honestidad. Y de mayor importancia aun en la relación que tenemos con nosotros mismos. Cuando hablo de nosotros mismos me refiero a dos: el yo interior y el exterior el visible. Me atrevería a decir que todo parte de ser honestos con nosotros mismos;
ya que solo se puede ser honesto con los demás si se lo es consigo mismo primero. 
Y ¿dónde comienza o como comienza esto de ser honesto consigo mismo? Seguramente a estas alturas ya habremos practicado lo de mirarse en el espejo detenidamente y preguntarse: ¿quien soy yo en realidad? Aunque para esta pregunta raras veces se obtiene respuesta, lo más común es que nos venga un repaso mental de nuestra vida, donde nacimos, quienes fueron o son nuestros padres, algunos sucesos de la infancia y lo que hemos logrado hasta hoy, por lo general resumido con una etiqueta social como doctor, ingeniero, comerciante o mecánico. 

Pero resulta un poco inquietante cuando nos damos cuenta reflexionando más profundamente que en verdad no somos nada de eso.Y surge la gran pregunta ¿entonces quién soy? Quizás en la vida cotidiana adoptamos el rol de un personaje asignado por nosotros mismos o alguien más y respondemos soy fulano de tal, tengo 40 años, medico, casado con 2 hijos y actualmente divorciado.
Pero yo diría que esas respuestas corresponden al yo visible y ¿cuáles serían para el yo invisible? Al ser humano y en especial a la mente humana le gusta que se les den formulas para todo, nos gustaría que se nos dijera: sabes eres tal o cual o lo de más allá. 

Lo llamativo es que descubrir quienes somos en realidad no parece ser algo que podamos definir completa ni concretamente, por experiencia me parece que basta con que un buen día nos hagamos la primera pregunta con atención, con profunda atención y de ahí se entra en un proceso que nos va arrojando más luz a medida que seguimos atentos a descubrirnos a nosotros mismos. La biblia hace una alegoría muy hermosa respecto al camino del hombre: Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto. Claro que nadie es justo o perfecto así que se entiende por justo a aquel que reconoce que necesita ayuda divina para encontrar las respuestas.

Para comenzar a ser honestos con uno mismo ayuda interrogarse con frecuencia algunas cosas: ¿para que hago esto? ¿es esto lo que realmente quiero? ¿esto es lo que verdaderamente creo?..claro que a casi nadie le gusta encararse a si mismo sobre todo cuando tenemos que reconocer nuestros puntos débiles y se debe más que todo porque nos desafía a cambiar. Y la mayoría preferimos dejar todo como está sobre todo cuando creemos haber encontrado una situación ideal.

Otra cosa que cuesta mucho es detenerse a pensar y preguntarse: un momento! ese personaje que estoy representando ¿seré realmente yo? diría que casi siempre preferimos huir de ese tipo de preguntas y zambullirnos completamente en nuestras representaciones cotidianas absortos por los quehaceres incluido el estrés. Pero si no hacemos esa pausa nos perderemos de lo que verdaderamente importa, simplemente por no detenernos a mirarlo. 

La honestidad optimiza todas nuestras relaciones, las de parejas, las de padres e hijos, nuestras amistades y aun nuestras relaciones laborales y comerciales.

La honestidad es una cualidad de calidad humana que consiste en comprometerse y expresarse con coherencia y autenticidad (decir la verdad), de acuerdo con los valores de verdad y justicia. Se trata de vivir de acuerdo a como se piensa y se siente. Wikipedia.

Parece tan difícil verdad? Sobre todo en una sociedad donde la moneda corriente es justamente lo contrario, donde las reglas de juego se basan en engañar y ser engañados, y con esta actitud aunque resulte paradójico al final a quien terminamos engañando es solo a nosotros mismos, porque queramos o no nos llega la hora de la verdad. Así que recordando que ser honesto se trata de un proceso, un sendero y como tal solo se puede recorrer paso a paso, demos entonces el más importante, el paso inicial.
Y tu apreciado lector; ¿que piensas de la honestidad?