¿Es posible pensar con lucidez en el mundo actual? El Trabajo

Por Manuel Basurto V.
Mucha gente no puede ni emanciparse, es decir, no puede ni darse cuenta de la esclavitud en que le mantienen las ideas en medio de las cuales se ha educado. Samuel Butler
Esta mañana leí este pensamiento y me quede pensando detenidamente
en cuan cierto es, me pregunte: ¿como podemos libertarnos si ni siquiera nos damos cuenta de qué somos esclavos? Y creo que una de las cosas que más nos esclaviza son nuestros propios pensamientos, sobretodo los que hemos ido almacenando en nuestra mente y espíritu sin discernirlos y que han adquirido tal solidez que nos llegan a parecer verdades absolutas. Pienso que de cuando en cuando es bueno revisar nuestras creencias y sobretodo preguntarnos ¿porqué hemos llegado a creer lo que creemos?

Una de estos conceptos que me parece que llevamos aceptando desde centurias es el del "trabajo", el cual a mi modo de ver ha llegado a ser sinónimo de rutina, esfuerzo y aun esclavitud. En pocas palabras trabajar significa para la gran mayoría "hacer algo que no estarías dispuesto a hacer si no te pagaran". Sin embargo y a pesar de ser así, creo que hemos llegado a incorporar este concepto a nuestras vidas aceptando que sea de esa manera y no solo eso, sino que nos lo han implantado de tal manera que nos hacen sentir orgullosos de realizarlo de esa forma. Para muchos cumplir una jornada laboral es lo más gratificante que existe, sin detenerse a pensar ¿para qué trabajan? y sobretodo ¿para quien?. Se a dicho que "el trabajo dignifica el hombre" y no me cave la menor duda, sobretodo cuando ese trabajo que realizamos es un aporte de lo que somos y lo ofrecemos como un servicio a los demás y que por tanto merece ser remunerado. 

Pero me pregunto para ¿cuantos es realmente así? yo diría que para muchos no. Más bien se ha convertido en una actividad sacrificada que si pudieran de buena gana no realizarían y ese estado emocional cotidiano los lleva a creer que como se "sacrifican" y se esclavizan "trabajando duro", entonces se merecen lo que ganan y obtienen mediante ese sacrificio, lo cual les parece siempre poco. Aquí pretendo aclararme a mi mismo un concepto erróneo, el cual es, que partimos de una idea equivocada de lo que es el trabajo, desde el momento en que no hacemos lo que amamos o no hemos llegado a amar lo que hacemos. 

Queda sobreentendido que cualquier actividad humana conlleva un grado de esfuerzo y hasta sacrificio, a lo que me refiero es a la falta de un sentido más elevado en esa actividad, que podría traducirse en una tarea creativa, inspirada y por tanto de utilidad a uno mismo y los demás la cual nos haría sentirnos más plenos y realizados.
Creo que estos patrones de conducta errados son condicionados y los adquirimos por el constante bombardeo que recibimos desde la infancia a través de la educación, los medios, la publicidad, etc, que a cada instante y por todas partes nos están dictando como debemos comportarnos, en que creer, que es lo aceptable y por último que es lo "falso" y que lo "verdadero". 

Ahora mismo el mundo está viendo con claridad que se nos educa para producir y consumir, no para pensar. Y frente a todo eso uno se pregunta: ¿como se hace para pensar y vivir con lucidez  en un mundo así? como siempre, creo que la respuesta la tendrá que buscar cada uno, pero una pauta que nos puede ayudar es la de intentar librarnos de cualquier autoridad psicológica  que nos quieran imponer que no sea la nuestra. Dicho en otras palabras, ejercitar nuestro derecho a pensar, dudar y disentir individualmente no sometiéndonos al pensamiento de otro, sea quien sea quien nos lo quiera imponer.