19 sept 2012

Vivir o Existir...esa es la cuestión.

Por Manuel Basurto V.
Posiblemente debido a la gran influencia que ejerció en mi adolescencia un clérigo el cual me enseñó con su ejemplo a ser un inconformista, es que nunca he podido llegar a aceptar algunas normas de vida que he visto que para la mayoría son patrones inamovibles.
Siempre he sentido un fuerte anhelo de vivir intensamente y seguramente será así también para cada uno de uds. Ahora bien, reflexionando acerca de lo que puede significar para cada uno "vivir intensamente", me encuentro con tantas opciones e interpretaciones como seres humanos hay. Recuerdo las palabras de un amigo próspero y rico el cual me solía decir: "lo que yo más quiero es vivir una vida de calidad", para él esto se traducía principalmente en disfrutar de sus bienes materiales y de todo aquello que pudiera satisfacer sus sentidos con la más optima calidad, cruceros de verano, exquisitos manjares, deliciosas bebidas, finas ropas, etc. 

Y no lo critico, cuanto más sabiendo que a pesar de que sus anhelos y deseos estaban centrados en lo sensual y material, guardaba un profundo respeto por lo interior y espiritual lo cual se reflejaba en la camaradería que trasmitía cuando estaba en compañía de otros seres humanos, convirtiéndolo así en un excelente anfitrión. A mi entender lo que pasaba con él es que percibía que todo ese esplendor material no era nada comparado con lo que percibía interiormente en el plano invisible, pero que al no ser tan obvio y palpable como lo otro terminaba obnubilando su visión.


"Así como los ojos de los murciélagos se ofuscan a la luz del día, de la misma manera a la inteligencia de nuestra alma la ofuscan las cosas evidentes." Platon

Pero ¿qué es lo que diferencia vivir de existir? como decía antes hay muchas interpretaciones al respecto, pero básicamente todas coinciden en que vivir es algo más que simplemente existir. Para vivir la vida esta tiene que tener algunos condimentos que la conviertan justamente en algo vivo, como son: creatividad, motivación, sueños y metas, cambios, inspiración, riesgos y por lo menos un mínimo de libertad, y seguro que uds. le podrán agregar muchas cualidades más. 


A mi me parece que no es tanto lo que se haga sino la manera en que se hace, es bien sabido que por ejemplo vivir intensamente no tiene nada que ver con hacer o tener todo lo que nos viene en gana, ya que por lo que se ve muchas veces deja a la persona más vacía e insatisfecha que cuando poseía poco o nada. Yo diría más bien que se trata de encontrar un buen equilibrio partiendo de que nuestro propósito principal en esta vida es darla, ya que nada podemos adquirir ni conservar durante toda una vida y la manera de darla es ofreciendo un servicio a los demás.


Otra opción más que se nos presenta es simplemente vivir una "vida llevadera" es decir soportable, tolerable, sin grandes agobios ni pesares. Hace poco estuve hablando con una persona que trabajo 35 años en la misma empresa, solo una vez salió de su ciudad natal ya que para él viajar significa riesgo, con el fruto de su trabajo construyó su casa donde vive solo con su esposa, las dos hijas que tuvieron se independizaron, jamás tuvo una aventura en ningún terreno, ahora ya jubilado esta persona manifiesta que la vida para el es "así no más". 

En otras palabras alguien que solo vive para sí mismo. Claro que esto no es posible porque de todas maneras nos afectamos unos a otros, como tampoco es posible a mi modo de ver, hacer mucho para hacerle la vida más llevadera a los demás, ya que la existencia misma está llena de cambios, desafíos, obstáculos y felicidad así como de perdidas y dolor. Pienso que la mejor contribución que podemos hacer para facilitar la travesía de alguien más es señalarle el camino que lo conduzca a descubrirse a si mismo y quizás compartir nuestra experiencia (errores) con la esperanza que ellos no cometan los mismos.













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